San Mateo de Huanchor rindió homenaje a: MÁRTIRES DE LA ECOLOGÍA

El 3 de enero último el pueblo de San Mateo de Huanchor, provincia de Huarochiri, Región Lima rindió justo homenaje a sus mártires asesinados el 3 de enero de 1934.

Los múltiples reclamos documentadamente de 1930, 1931, 1932 eran desoídos por los gobiernos que siempre estuvieron al servicio de las transnacionales. Las comunidades campesinas de las riberas del río Rímac se opusieron al trabajo de fundición de Tamboraque porque afectaban los ecosistemas.

La fundición de Tamboraque con la complicidad de las autoridades seguía emanando los humos venenosos de arsénicos, impactando contra la flora y fauna ocasionando mayor miseria, pobreza y muerte.

El 2 de enero de 1934, muere Filiberto Tello envenenado por el arsénico de la fundición de Tamboraque y ante la negativa del administrador de la mina de sufragar los gastos de sepelio, el pueblo de San Mateo de Huanchor marchó a la fundición y el «pueblo enardecido» destruyó con sus manos la fundición por ser amenaza a sus vidas.

El 03 de enero de 1934, las fuerzas represivas, al mando del prefecto de Lima, realizaron la emboscada a los comuneros de San Mateo y desarrollaron una masacre con 5 asesinados, decenas de heridos y muchos apresados injustamente.

Este homenaje es un botón a tener en cuenta ahora que los pueblos requieren de inversión con responsabilidad social, respeto al medio ambiente y desarrollo.