Mensaje de Piero recobra vigencia ante el tsunami desinformativo del fujimorismo sobre el juicio al ex dictador.
Como si el pueblo no tuviese memoria para recordar los operativos psicosociales que se organizaban desde el SIN, enlodando honras y justificando las violaciones a los derechos humanos contra los opositores, ciertos medios de comunicación allegados al ex dictador alistan un tsunami mediático para defender lo indefendible.
El abogado César Nakazaki ha pedido seis semanas para su alegato de inocencia, en un proceso judicial donde el ex presidente, Alberto Fujimori, parecía sufrir de amnesia o se sumía en el silencio para no asumir su responsabilidad, confiando en los malabares verbales de su defensor.
Se nos viene un maratónico alegato de «inocencia» durante mes y medio, donde la estrategia apunta a politizar el proceso, con la letanía de que se «respetaba los derechos humanos» y la «proyección social con los campesinos», para tapar las matanzas de Barrios Altos y La Cantuta que, dicho sea de paso el ex dictador califica de «excesos ocasionales».
Como fantasmas de ese pasado siniestro, se difundieron los videos donde Vladimiro Montesinos entregaba pilas con fajos de dólares a dueños de canales de televisión y diarios, para digitar las informaciones desde Palacio de Gobierno y marginar a los periodistas que se negaban a participar en esa farsa mediática.
Pero ellos siguen el consejo de Machiavello, que dicho sea de paso aprovechó Joseph Goebbels cuando maquillaba las matanzas de Adolfo Hitler: miente, miente que algo queda.
Es el show mediático que alistan los viejos alumnos de Montesinos aunque en esta oportunidad, sus cantos de sirena no convencen a nadie porque, sobre todo, existe una prensa independiente que debe afrontar el desafío de llegar a la verdad entre tanto lodo.
La antigua táctica fujimontesinista de distorsionar manchando honras, inflando las amenazas terroristas, golpeándose el pecho por una «pacificación» basada en la paz de los cementerios, escándalo de vedettes, droga, sexo y muerte.
Y cómo cobra vigencia ese mensaje de Piero en su canción: Y todos los días y todos los días, los diarios publicaban porquerías, todos los días, todos los días.
