Por: Hugo Cabieses En mayo del año pasado, el entonces ministro de Energía y Minas, Juan Valdivia, recibió en su despacho la visita de su homólogo del Brasil Edson Lobao, anunciando con bombos y platillos que se invertirá US $ 2 mil millones en la central hidroeléctrica del Inambari: «Éste es uno de los 7 proyectos que han sido considerados en un documento oficial del Estado peruano», expresó el ministro aprista.
En la provincia de Carabaya esta ubicada la Central Hidroeléctrica de San Gabán, tan reclamada por los habitantes del altiplano e inaugurada hace 10 años. Sin embargo el río San Gabán es afluente de otro mayor llamado Inambari. Este a su vez deposita sus aguas en Madre de Dios que se dirige al Brasil. En la zona de Mazuco -dicen que geográficamente pertenece a la Región Puno-, se ubica la gran posibilidad hidro-energética del Inambari, que para identificación en el Ministerio de Energía y Minas lo denomina C.H. INA 200.
El Eje PBB y el IIRSA
El proyecto forma parte del Eje Perú, Brasil y Bolivia (PBB) del gran mega-proyecto llamado Integración de la Infraestructura Regional Sudamericana (IIRSA), que lanzaran los presidentes de esta región en el año 2000. El IIRSA constituye, según la analista mexicana Ana Esther Ceceña, una verdadera territorialidad de la dominación, una suerte de planes de ordenamiento del territorio americano para ponerlo al servicio de las transnacionales y la potencia imperial.
Esta dominación se asienta en tres momentos:
1. Entre 1994 y 2000 con el TLC NA (EEUU, Canadá y México), el Plan Colombia (PC), el Plan Puebla Panamá (PPP) y el abortado plan de crear un Área de Libre Comercio de las Américas (ALCA);
2. Entre el 2000 y el 2006 con la consolidación temporal de los planes militares propiamente de EEUU en Colombia y México bajo el pretexto de la lucha contra el «narcoterrorismo»; y,
3. Entre 2007 y el presente en la que EEUU busca neutralizar la presencia petrolera de Venezuela y los gobiernos díacoles de Ecuador y Bolivia a fin de controlar «las nuevas venas abiertas hacia el imperio que responden a nuevas necesidades y a una diferente selección de las materias primas y los llamados recursos estratégicos» (Ana Esther Ceceña, Paula Aguilar y Carlos Motto; Territorialidad de la dominación: IIRSA; Observatorio Latinoamericano de Geopolítica; México 2008).
Comenzaron los estudios
Los proyectos energéticos formulados o en marcha de la región Puno son los siguientes:
1. San Gabán I (110 Mw), San Gabán III (105 Mw), San Gabán IV (130 Mw), Huenque (5.5 MW), Lagunillas (24 Mw), Macusani (31 Mw), San Antón (12 Mw), Corani (12.3 Mw) y, el más grande todos, Inambari (1,250 Mw). La hidroeléctrica estará localizada entre los límites de los departamentos de Puno, Cusco y Madre de Dios, y de las provincias de Carabaya, Quispicanchis y Manú, la misma que servirá básicamente para alimentar las necesidades de energía de la parte centro-occidental de Brasil. El ministro Valdivia destacó la importancia del Convenio de Cooperación suscrito entre el Perú y Brasil abre las puertas a la interconexión energética y sostuvo que se establecerán las acciones necesarias para avanzar en este esquema de integración. El Perú tiene una cartera de varios proyectos que generarían unos 20 mil megavatios.
El 12 de junio del 2008 se promulgó la Resolución Ministerial Nº 287-2008-MEM/DM, mediante la cual se otorga «concesión temporal de generación para desarrollar estudios de la futura Central Hidroeléctrica Inambari, de acuerdo con el Decreto Ley N° 25844, Ley de Concesiones Eléctricas, presentado por la Empresa de Generación Eléctrica Amazonas Sur S.A.C., persona jurídica inscrita en la Partida N° 11068780 del Registro de Personas Jurídicas de la Oficina Registral de Puno». Este dispositivo señala que la Hidroeléctrica de Inambari tendrá una potencia instalada estimada de 1 500 MW.
El 18 de junio del año pasado, el Ministerio de Energía y Minas otorgó esta concesión y los estudios se realizarán en los distritos de Huepetuhe, Camanti, San Gabán y Ayapata, provincias de Quispicanchis (Cusco), Manu (Madre de Dios) y Carabaya (Puno), respectivamente. Por 24 meses el concesionario está obligado a realizar los estudios respetando las normas técnicas y de seguridad, preservando el medio ambiente y salvaguardando el patrimonio cultural, así como el cumplimiento de las obligaciones establecidas en la Ley de Concesiones Eléctricas y su reglamento. El proyecto consiste en la instalación de una central hidroeléctrica en la garganta del río Inambari mediante la construcción de una presa de 210 m de altura y una casa de máquinas con 1450 MW instalados, ubicada a pie de presa.
Por otro lado, el 25 de septiembre del año pasado, Electrobras, la compañía estatal eléctrica de Brasil, confirmó la ejecución de cinco proyectos hidroeléctricos en el Perú. Durante el Encuentro Empresarial de Inversiones, Comercio, Turismo y Cultura del Perú – Expo Perú 2008, que se realizó en la ciudad de Sao Paulo (Brasil), el ministro Juan Valdivia se reunió con representantes de esta empresa, quienes manifestaron su interés por desarrollar diversos proyectos en el país.
La C. H. Inambari es el proyecto de mayor envergadura estudiado en el Perú, comprende la construcción de una presa de enrocado de 220 m. de altura, las obras de demasía diseñadas para un caudal de 9000 m³/s, la instalación de 6 tuberías de presión y 6 unidades de generación con una potencia nominal de 345 MW c/u y caudal de diseño de 300 m³/s aproximadamente. La Casa de Máquinas se ubicará a pie de presa. El costo total estimado de la obra asciende a S/. 6 mil millones y el tiempo de construcción de 6 años.
Objeciones ambientales
De acuerdo a información fidedigna, el dique de la C.H. Inambari se ubicaría aguas abajo del puente, aunque no se cuenta con información exacta de su ubicación final. No obstante, al parecer afectaría completamente el puente y la carretera Interoceánica Sur en los tramos 2, 3 y 4. Asimismo, este dique tendría una altura de 100 m (aunque el proyecto original era de 150m) y la superficie del embalse estimada sería de 40 mil hectáreas. Acorde con estos datos: los principales riesgos ambientales identificados serían:
1. El paisaje básico afectado es de bosque ribereño y laderas de montaña.
2. Debilidad de los taludes del embalse que, por efecto de la presión del agua embalsada, puede generar derrumbes, afectando la capacidad de la presa.
3. El proyecto de ingeniería no aborda el asunto de pase de peces migratorios, solo el tema de áreas de remanso.
4. Tampoco están previstas acciones de mitigación para las emisiones de metano, producto del embalse de los bosques.
5. Se construirían variantes de los tramos 2, 3 y 4 de la carretera interoceánica lo que implicaría -al parecer- afectar la Zona de Amortiguamiento del Parque Nacional Bahuaja-Sonene.
Interés estratégico brasilero
A principios de febrero de este año se anunció que empresas brasileñas incrementan a US $ 5 mil millones la inversión que harían en hidroeléctrica Inambari. Se trata del consorcio Electrobras, Furnas y OAS de Brasil duplicará la inversión a US $ 2500 millones más de los que tenía previsto realizar en la C.H. Inambari cuyas obras se iniciarían a mediados del 2009, informó el gerente regional de la empresa Construtora OAS, Silmar Conde de Paiva.
Precisó que los estudios de prefactibilidad, que empezaron en junio de este año, han demostrado que existen excelentes condiciones hidrográficas que permitirán que la potencia de dicha central sea de 2500 megavatios (Mw). «Inicialmente estimamos que la potencia sería de 1,400 Mw, pero los estudios han demostrado que hay potencial para mucho más, por eso la inversión se incrementará a 5 mil millones de dólares».
Conde de Paiva precisó que Electrobras y Furnas tienen el 49% de participación en el consorcio, mientras que Constructora OAS el porcentaje restante. Además, manifestó que OAS está en conversaciones con otros inversionistas que tienen interés en participar en este proyecto. OAS es una de las constructoras más importantes de Brasil con proyectos en el sector de infraestructura, saneamiento, energía, petróleo y gas en ese país, además de tener operaciones en Chile, Argentina, Uruguay y Colombia.
Es este uno de los proyectos más atractivos que tiene el Perú, en el sur y cerca de Brasil. Con este país hemos iniciado una excelente relación comercial bilateral y sabemos que por su crecimiento requiere energía eléctrica. La carretera Interoceánica nos acercará a los Estados de Acre y Rondonia que tienen, más de 2 millones de habitantes. Estas poblaciones, son mercados potenciales para los productos del altiplano y uno de ellos es la energía eléctrica.
Preguntas clave
No obstante, hay dos preguntas claves:
1. ¿Por qué tanto interés del IIRSA por impulsar este mega-proyecto?; y,
2. ¿Por qué Brasil y sus empresarios están tan interesados en invertir sumas millonarias en este
esfuerzo.
Sobre lo primero, pues las respuesta pudiera estar en la reflexión del analista uruguayo Raúl Zibechi respecto al IIRSA: «(se trata) de una integración doblemente subordinada: a Brasil por parte de los países sudamericanos, y del conjunto de la región al mercado y el empresariado mundiales (Raúl Zibechi: http://www.ircamericas.org/esp/3314).
En relación con la segunda pregunta, pues Brasil está teniendo fuerte oposición y movilización social a la construcción del Complejo Madeira, lo que lo lleva a buscar otras fuentes energéticas.
